el cambio será feminista, o no será

Una vez más las ondas de Eguzki Irratia, la radio libre de Iruñea. me dan la oportunidad de reflexionar, primero en el programa «La escotilla» y después compartirlo a través del blog. Es curioso porque creo que a veces perdemos el sentido de lo que hoy en día quiere decir libre, en esta sociedad cada vez más prisionera, en general, de quien paga, de quien dice lo qué es pecado y de quien dice lo qué está bien y lo qué mal según sus leyes. Por eso un altavoz libre es hoy en día es más que necesario.

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Este pasado domingo celebrábamos el Día de la Mujer en un momento en el que el cambio político y social se vislumbra cada vez más cerca. Y gritamos, todas y todos en la manifestación, que este cambio será feminista o no lo será. A finales de febrero, en este sentido, EH Bildu de Iruñea organizó en su sede, en el EH Bilgune, ese espacio para el análisis, la reflexión y el debate conjunto, una mesa redonda entre diferentes organizaciones feministas de la ciudad. De aquéllas intensas casi dos horas, tres ideas principales se me quedaron en la cabeza, tres ideas que deberían ser aliciente en este cambio de modelo por el que estamos trabajando.

La primera de ellas es el rejuvenecimiento del movimiento feminista al albor de un creciente machismo entre las personas de menor edad. Tras décadas de lucha feminista parece que es como si la sociedad en su conjunto se hubiese relajado, como si pensásemos que lo teníamos todo solucionado, y resulta que las actitudes y agresiones machistas originadas en jóvenes son cada vez más numerosas. Y digo yo que este modelo de sociedad de la televisión y el consumismo, del aparentar y que cada cual se saque las castañas del fuego, algo tendrá que ver. Quizás ahora nos damos cuenta que las políticas de la derecha a nivel estatal y desde luego en Navarra, tienen mucho que ver con esto. El neoliberalismo de esas políticas va en contra de las personas trabajadoras, haciendo especial hincapié en las mujeres. No hablo solo de las consecuencias económicas de esas políticas, si no de las consecuencias más que palpables en el propio modelo de esa sociedad, en la ética de esa sociedad y en las referencias que tiene, que tenemos, en esta sociedad. Ya es hora de que nos demos cuenta que vivimos en un sistema económico patriarcal y machista. Pero el hecho de que cada vez más mujeres jóvenes se sumen a la lucha por la liberación de la mujer, porque hay que decirlo claro, las mujeres no son libres en este modelo de sociedad impulsado por la derecha, es motivo para la esperanza y para seguir trabajando por un modelo de sociedad que supere el patriarcado y la heteronorma, pilares del neoliberalismo actual.

La segunda fue la constatación de que existe un machismo que está muy extendido en la sociedad, mucho más de lo que nos imaginamos. Es el llamado micromachismo, un machismo que lo tenemos tan arraigado en nosotras, y sobre todo en nosotros, que casi no nos damos cuenta. El micromachismo consiste en diferentes actitudes que siempre tienen algo que nos molesta en nuestro interior, por lo menos a algunas personas, pero a las cuales damos poca o ninguna importancia, en general. Son hechos muy concretos que incluso, a veces, nos pueden hacer gracia, pero que son los ejemplos más claros de esta sociedad patriarcal y machista en la que vivimos. Si una mujer y un hombre van a un bar y piden una caña y un café, el café, en el 95% de las ocasiones, lo van a poner delante de la mujer. En estas ocasiones, la mayoría de las personas incluso sonríe por la «confusión» y cambia la consumición con la otra persona y quien lo ha servido, si se cree que tiene gracia, incluso puede que haga un chiste con el que volvamos a sonreír. Por eso es imprescindible que cada una de nosotras y nosotros vayamos haciendo revisión personal, un análisis de nosotras mismas y cambiemos esas actitudes. El cambio de una actitud micromachista de una persona puede no suponer mucho, pero si muchas personas lo hacemos será un cambio bastante más grande del que pudiésemos imaginar en un primer momento. Por eso, en esto del cambio del que hablamos desde el principio, la aportación de cualquier persona, por pequeña que sea, es imprescindible para lograr el nuevo modelo de sociedad que reivindicamos.

micromachismo

La tercera idea que se me quedó es que la lucha feminista es una lucha política revolucionaria. En estos momentos cualquier sector político de los que existen celebran el 8 de marzo. Es una fecha que lo mismo se celebra con una manifestación en la calle, que con una declaración institucional, que con una obra de teatro sobre mujeres. Es lo que tiene el sistema, que intenta, una y otra vez, vaciar de contenido las fechas señaladas en el calendario y no solo las fechas, si no, en última instancia, las propias luchas que resultan incómodas para el sistema neoliberal y machista en el que vivimos. Y es que el aspecto revolucionario de esta y de cualquier lucha consiste en cambiar de raíz algo en concreto. Si no lo cambiamos de raíz y nos dedicamos a gritar solo una vez al año, de nada o de muy poco servirán nuestros gritos, porque eso no molesta ni supone inconveniente alguno al modelo de sociedad que queremos cambiar. Y de ahí la necesidad de seguir debatiendo, analizando, reflexionando, compartiendo, gritando, manifestando, extendiendo, luchando y peleando por una sociedad feminista, que no es más que, al fin y al cabo, una sociedad más libre y seguramente más justa.

Esas son tres de las claves de este cambio al que apenas le quedan dos meses para que llegue: participación necesaria de la gente joven, implicación personal de cada una de nosotras y nosotros y constancia en nuestra labor sin perder el objetivo principal. Y todo esto con la necesaria e imprescindible participación y protagonismo de las mujeres, porque este cambio tiene que ser feminista, o no lo será.

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El sábado 14 de marzo, en la Hiri Bilgune de EH Bildu Iruñea, debatiremos y, lo que es más importante, decidiremos, entre todas y todos, el ADN del programa que servirá de base para la construcción de ese nuevo modelo de ciudad. Un modelo feminista sí o sí.

Entrada en base a la colaboración en el programa de Eguzki Irratia, La escotilla, de hoy miércoles 11 de marzo de 2015.

Publicado por Daniel

Ciudadano en alerta de un planeta que estamos aniquilando, en búsqueda permanente, enamorado de la escucha y del inmenso silencio. Todo por escuchar. Lecturas escogidas, siempre.

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